lunes, 17 de noviembre de 2008

Extrañar...


Antes que todo quiero decir que la siguiente definición no va tener el sentido de una definición común, como la manera de describir en cualquier diccionario. Sino que va tener una definición informal para los grandes expertos en la materia y más formal para la gente común.
Empezemos encontrando la raíz de esta palabra. Primeramente, la palabra “extrañar” tiene relación con la palabra extraño. Todos sabemos que es la palabra “extraño”, o, algo extraño. Entonces, podemos empezar por ahí a explicar qué significado tiene la palabra “extañar”.
Muchas veces, y en mayor de los casos, se usa de manera errónea esta palabra. Mayormente se usa en el plano del “Amor”, cuando nos referimos diciendo que extrañamos a un ser querido que ya no está. También lo usamos en el plano amical y en otros asuntos. Muchas veces se usa esta palabra en canciones, poemas, versos, frases, etc,etc. Pero realmente se desconoce de esta palabra en su real significado y se conoce mucho en cuanto a su pronunciación porque casi todos tenemos un concepto superfluo de esta palabra pero no sabemos su significado real.
La palabra extrañar viene de extraño. Entonces podemos afirmar que el significado de extrañar es cuando estamos en una situación que no es común para nosotros y nos parece extraño estar en esa nueva situación. Esto aunado con que dicha situación tiene la misma relación con una situación anterior, pero, no es la misma. Entonces, dicha nueva situación nos trae un sentimiento de pena, porque la situación anterior nos pareció mejor que esta, o quizá, no nos es común esta nueva situación ya que nos hemos acostumbrado a la situación anterior. En esa larga definición podemos explicar en su real sentido la palabra “extrañar”.
¿Entonces qué palabra debemos usar cuando sentimos pena por la persona que no está más a nuestro lado?. De que la persona no esté a nuestro y nos sentimos mal y con pena, podría también ser englobado por la palabra “extrañar”, ya que estamos en una situación que no es la misma de antes porque sentimos que falta esa persona. y en esa situación decimos “te extraño” o “la extraño”, etc. Pero, decir esas palabras suenan como sin sentido. Porque a quién extrañas?, Quién te parece extraño?. La verdad es para confundirse. La palabra que mejor se encaja a dicha situación o sensación son las palabras nostalgia o añoranza. Nostalgia es cuando sentimos pena por algo que ya no está a nuestro a lado o algo que no podemos experimentar, y, añoranza es cuando recordamos algo que se ha perdido y no volveremos a tener. Entonces, en ese caso creo más encaja la palabra “nostalgia”. En otros casos lo que más puede encajar es la palabra añorar, porque quizá ayamos perdido algo para siempre.
Bueno, hasta ahí con la definición de la palabra extrañar, espero se aya entendido lo que he tratado de definir sobre dicha palabra. Ahora, vayámonos a analizar la situación de una persona cuando dice a otra : “te extraño mucho”, o cuando dice: “extraño mucho a mis amigos” o cuando dice “extraño tanto esa ciudad”, etc, etc.
Cuando una persona dice que extraña a alguien lo está expresando en un sentido donde trata de explicar que esa persona fue algo bueno para él o también que esa persona le hizo sentir bien en algún momento pasado. Esto también cuando la persona se refiere en plural, osea, cuando dice que extraño muchos a mis amigos o padres. No sólo esta persona está tratando de expresar que aquella persona le hizo sentir bien en algún momento del pasado, sino también, la persona está tratando de dar a conocer que no se encuentra bien en ese instante o que está sitiendo una pena porque extraña a la otra persona, o explicando en el sentido real, le parace extraño esta nueva situación. Analizando esta parte de que cuando la persona siente pena por algo que ya no lo tiene. Podemos ponernos a meditar y preguntarnos ¿Por qué sentimos pena?, ¿Por qué la nostalgia?, ¿Por qué la añoranza?. Si hemos querido a esa persona o la hemos amado, ¿Por qué sentimos pena ahora?, ¿Por qué nuestra alma no está tan bien en esos momentos?. A veces cuando experimentamos la ausencia de una persona, llegamos a deprimirnos, en otros casos se llega a situaciones extremas, lo cual espero analizarlo en otro momento. Sigamos analizando y preguntádonos el por qué sentimos pena cuando una persona querida por nosotros no está más. ¿Qué?, ¿Era malo haber querido?, ¿Fue un error haber amado?, ¿La persona no fue tan especial y por eso nos trae ahora dolor?. Quizá esas sean las preguntas de controversia que engloba cuando hemos amado o querido a una persona en especial. Pero la verdad no fue un error haber querido o amado a esa persona. El amar y el querer es lo que todos debemos hacer y todos debemos recibir. Cuando se ama o se quiere a una persona estamos llenando de armonía al alma de una persona, y por ende, le hacemos sentir bien, llenándolo de felicidad. ¿Entonces por qué luego nos trae dolor cuando no está?. La respuesta a esta paradoja la puedo explicar de la siguiente manera:. Es que con esa persona que hemos experimentado algo bueno y que ha traído armonía a nuestra alma, ahí en esos instantes hemos creado un estados de dependencia, osea, hemos copiado algo de su ser y lo hemos instalado a nosotros. Hemos hecho parte de ella en nosotros mismos. Nos hemos olvidado de nuestro yo y hemos hecho que ella sea parte nuestra. Hemos llenado nuestra alma de armonía a costa de presencia o la palabra de otra persona. Cosa que cuando esta persona ya no está, sentimos que se nos a arrancado algo de nuestro ser, que nos falta algo, y sentir un vacío que sólo lo podríamos llenar cuando esa persona regrese.
Dedemos ser un poco egoistas cuando se trata de hacernos felices. El pensar que sólo podemos ser felices con otra persona es como decirnos que nosotros somos la infelicidad, o, que sólo nosotros y unicamente nosotros somos infelices. Una persona no es infeliz por naturaleza, la armonía de nuestro ser se alimenta con la naturaleza. Al estar vivos y gozar de buena de salud ya somos personas felices, somos dueños de nosotros mismos y tenemos todas las armas para vivir en armonía. Con esto no quiero decir que las personas que no gozan de buena salud son infelices, no, nada que ver. Las personas que no gozan de buena salud también son felices en mayor de los casos, porque el solo hecho de tener la esperanza de que se van a mejorar ya lo hacen íntegros. Además una persona que no goza de buena salud debe valorar más la vida que la propia enfermedad, porque estamos vivos y podemos hacer muchas cosas que nos haga felices, llenando así de armonía nuestra vida.
La persona no es infeliz por naturaleza, somos felices por naturaleza. Entonces, al querer a una persona o amarla, no debemos desprendernos de nosotros mismos. Debemos pensar que somos felices con nosotros mismos en ese momento y que la persona que trae armonía nuestra alma es sólo un agregado a nuestra felicidad. Ponernos a pensar que nada es eterno en este mundo. Somos personas mortales que llegamos al mundo como un pensamiento. Nacemos y morimos en un instante. Entonces, antes que la muerte nos desaparezca tratemos de vivir felices, y sobretodo ser felices con nosotros mismos. No debemos depojarnos de nosotros ser cuando queremos o amamos a otra persona. Nosotros somos una infinidad de posibilidades, podemos ser felices del mil y un maneras, sólo hay que imaginarlas y luego ejecutarlas. Lo mismo debes tratar de crear en la otra persona. Jamás seas feliz creando infelicidad a la otra persona. Ponte a pensar que esa persona puedes ser tú, y no te gustaría que te hagan lo mismo. Con esto quiero tratar de dar a conocer que no debemos hacer que una persona que se vuelva dependiente de nosotros, no debemos permitir que dicha persona arranque su yo y haga de nuestro yo parte de ella. Como les he explicado en párrafos anteriores que arrancar el ser de otro para hacerlos nuestros trae en el futuro la pena y la nostalgia. Es por eso que debemos valorar la felicidad que nace de nosotros mismos y ser felices en cada momento y en cualquier situación. La felicidad interior crea la felicidad exterior. Tómenlo eso bien en serio.



TE EXTRAÑO, EL POR QUE?, SENCILLO, YA SOS PARTE MIO, Y CUANDO NO ESTAS ME SIENTO EXTRAÑA...

3 comentarios:

CARLA SPINDLER dijo...

Hola Lala, un gusto, recién empiezo a chusmear tu blog, y a primera vista tengo q decirte q la estética me encanta. Gracias por tu apreciación a mis palabras, valoro mucho otras miradas y la intención de contagiarlo a otros, por lo que por el contrario de molestarme, espero que otros conozcan el blog como lo hiciste vos, y compartirlo tanto como intercambiar ideas y comentarios. Un abrazo!! Carla

Gabriel Medina dijo...

Aunque parezca curioso "nostalgia" es un termino medico que acuño un suizo allá por el 1600 para las dolencias del corazón.
Estimada princesa, asumir esa finitud que usted bien plantea, es asumir que somos seres finitos y discontinuos que llegan solos y se van solos de este mundo. Allí radica la desesperación por ser felices con y en el otro. Y esto esta muy bien.
Somos un animal político, que no puede sino realizarse en comunidad, es decir a partir del otro. Por supuesto que esto no quiere decir no cultivar una virtud personal o ser un absoluto dependiente de los demás. Pero no se accede a nada que valga la pena en soledad. Figurese estar frente a una ciudad maravillosa y no tener nadie con quien compartir esa experiencia...
Le dejo un beso. Y gracias por pasar por mi blog.

BuscaPalabra dijo...

Princesa Desbordada, escribiste hace casi 6 años algo que precisaba a toda costa leer hoy, asi de perfecto es todo. Solo nos ha faltado, al menos a mi, darnos cuenta, de tal perfeccion.
Buscando la etimologia, significado mas real de la palabra "extrañar", me encontre con tu blog. No me sonaba su significado tradicional, no me sentia asi. Desconfiaba como desconfiaste vos de que eso fuera todo... Finalmente no he podido encontrar la palabra que defina lo que siento hoy, que alguien que quiero mucho esta lejos y lo va a estar por muchisimos dias, pero no es extrañar, de eso estoy segura. Seguire buscando... mientras agradezco el haberte leido. Abrazos!! Ana.-